Tostadas de Pan de Leche

Tenía que haberos publicado la semana pasada esta entrada. Pero he estado bastante liada y un poco vaga a la hora de editarla. Ya sé que ya han pasado los Carnavales y que medio país ha hecho tostadas de mil maneras. ¡Pero no podía dejarlo pasar! Esta receta tiene que quedar aquí para la posteridad. El año que viene, si queréis animaros, la buscáis y probáis.

Por aquí es costumbre usar un pan especial para tostadas. Tipo bollo pero alargado como una barra. Lo venden en supermercados y panaderías . A mí personalmente no me gusta mucho. Me es difícil de manipular porque es como una esponja que no para de beberse la leche. ¡Encima se rompe un montón y tela freírlas!

Por eso, hace ya tiempo que en su lugar uso los bollitos de leche. Vienen en paquetes de 8 o 10 unidades y los venden todo el año. Os explico cómo los hago yo.


Para 16 tostadas:

8 bollitos de leche
750-1000ml de leche
1 rama de canela
3 huevos
150 gr azúcar
un poco mas de azúcar para espolvorear
canela en polvo
1 botella de aceite girasol alto en oleico

 

Pongo la leche, el azúcar y la canela a al fuego. Remuevo con una varilla para que se disuelva el azúcar. Y una vez hierve, lo retiro del fuego. Pongo la sartén con el aceite a calentar.¡ Aquí empieza la operación REMOJADO!

Voy poniendo mitades de bollo en la leche perfumada, de cuatro en cuatro para que no se me ablanden demasiado. Las saco con una espumadera y las paso a un bol donde tengo el huevo batido. Compruebo que el aceite esté ya caliente echando unas gotas de huevo batido. Si Chisporrotea, las voy echando.

Yo tengo una placa de inducción y la pongo al 6 (tiene hasta 9). Dejo que se doren por las dos caras, pongo otra tanda a remojar en la leche y saco las fritas a una bandeja con papel absorbente. Las espolvoreo con una mezcla de azúcar y canela (a vuestro gusto) y las cambio a otra bandeja sin papel. Alguna vez las he dejado sobre papel, pero absorbe tanto que se quedan más secas.

En esta foto podéis ver al fondo la de pan de leche. Y en primer plano las de la barra de pan de tostada. Para que veáis diferencias de absorción, puse en una fuente dos de cada.

Las más pequeñas estuvieron menos tiempo en remojo, y la grandes las dejé bebiendo leche hasta hartarse. Ese exceso de humedad hace que luego salpiquen dentro del aceite. Y como no quiero quemarme y tampoco tener que cambiar varias veces el aceite para freír más de un plato...pues me quedo con mis bollitos. Dejo pendiente enseñaros las tostadas de crema, leche frita para algunos, haize para otros. Muxus