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martes, 26 de febrero de 2013

Falso Pastel de Arroz de Chocolate


Ya sabéis que yo no tengo mucho tiempo libre y por eso me gusta ir un poco a lo seguro en cuanto a las recetas dulces que hago. Pero hacía tiempo que me rondaba la cabeza probar a hacer el falso Pastel de Arroz con chocolate. Ésta es sólo una prueba, espero hacer más hasta encontrar una que me guste. Esta vez he utilizado chocolate valor a la taza. Seguro que es algo que casi todos tenemos en invierno en nuestras despensas. Otro día probaré con el cola-cao y otro con el cacao puro. Ya os contaré cual resulta la elegida y las diferencias al paladar.

Falso Pastel de Arroz de Chocolate
500ml Leche
200gr Chocolate Valor a la taza
125gr Mantequilla
150gr Azúcar
125gr Harina
3 Huevos
 
Mientras se precalienta el horno a 160º con calor arriba y abajo, pondremos la leche con la mantequilla a calentar en una cazuela. Cuando esté a punto de hervir, le echaremos el chocolate troceado. Bajaremos el fuego para que no se pegue y lo dejaremos hasta que se disuelva el chocolate. Una vez listo, lo dejaremos a un lado para que se vaya enfriando.

Cuando el chocolate esté tibio, añadiremos a la cazuela el azúcar, los huevos y la harina. (Foto 2 del collage)
Mezclaremos todo con una batidora túrmix  y lo pasaremos por un colador para quitar posibles grumos. (Foto 3 del collage)
 Engrasamos y enharinamos un molde de 20cm de los NO Desmontables y lo llenamos con la mezcla.
 Lo metemos al horno a 160º durante 1 Hora. (Foto 4 del collage)


Una vez hecho lo dejamos entibiarse en el molde antes de desmoldarlo.


Yo lo probé aun  calentito. La textura es muy parecida a la del pastel de arroz normal. Huele a chocolate que alimenta y sabe como un chocolate a la taza. Con un poco de nata montada y un par de nueces de acompañamiento, tiene que estar de rechupete.



Y como os he dicho, seguiremos experimentando la fórmula.
¡Y seréis los primeros en saberlo!

 

viernes, 22 de febrero de 2013

Tarta de Oreo

Los que me seguís por Facebook ya leísteis que el 11 de Febrero fue el cumpleaños de mi primo Derek. Y que le hice una supermega Tarta de Oreo como para invitar a medio barrio. Mis clientes estuvieron encantados de tenerla de postre.




Y cuando dije que la tarta tenía historia es que la tiene.

El día X en cuestión, por la mañana fuimos a Bilbao al concierto que tenía Carlos en la Plaza Nueva. Llegamos con antelación suficiente para hacer una incursión al “Obrador de Jon” en la calle Ronda. Abrieron en Agosto. Es el lugar perfecto para los que les gusta la repostería dulce y la salada, el buen café en un rinconcito con encanto rústico. A lo que iba, que la mañana empezó perfecta y a lo largo del mediodía se volvió desapacible y fría. Hicimos la compra, llegamos a casa, hicimos la comida, comimos…Y me puse a terminar la tarta. ¡Cuando miré el reloj eran las 17:45 y yo había quedado en Bermeo a las 18:00! Terminé a toda prisa la tarta, sin mucha decoración. Me habría gustado haberle dado un acabado liso y perfecto. Haberle puesto unos rosetones de crema entre las galletas. Pero se hizo lo que se pudo. Y fotos contadas. Pero no es el final de la historia. No, es que casi no llego a la cena. Volviendo de Getxo a Bermeo a dejar a mi amiga, nos cogió de pleno la tormenta. Creo que aun estoy ciega de los rayos que nos cayeron casi encima. La carretera se quedo blanca y helada como una pista de patinaje. La luna trasera se quedó tapada con una capa de granizo. Se nos fue dos veces el coche en dos curvas cerradas. ¡Qué miedo pasé! Y para colmo sin cobertura para avisar a la family. Pero llegué, sana y salva. Pudimos cenar y comer la tarta. Y ahí va la receta:

Bizcocho de Oreo
(Para molde de 20cm, y un bizcocho de 9cm de altura)

230gr mantequilla
440gr azúcar
400gr harina
4 huevos L
3 cucharaditas de Royal (15gr)
2 cucharaditas de pasta de Vainilla de Home chef
300gr leche
100gr de oreos trituradas de forma gruesa

Como siempre, lo primero es poner el horno en marcha, a 160º calor arriba y abajo. Vamos a forrar  el molde con papel de hornear. Primero se hace una circunferencia para el fondo del molde. Y después una tira larga que tenga el triple de altura que el molde. Se le cortan unos piquitos al papel por un lado para poder asentarlo mejor al molde. Se unta con un poco de grasa o con spray desmoldante, el molde para que se pegue el papel. Suena complicado pero no lo es tanto. Os dejo un enlace de cómo se hace.

Ponemos en la batidora la mantequilla blandita y el azúcar y le damos caña. Tiene que quedar cremoso. Lo siguiente será añadir los huevos uno a uno. Yo entre huevo y huevo añado una cucharada de la harina que tengo ya tamizada junto con la levadura. Así no se me queda con aspecto cortado. Una vez tenemos los huevos bien incorporados en la mezcla, echamos la harina con la levadura restante y la leche. Dejamos que bata un poco. Ahora se añade el extracto de vainilla. Y por último las galletas oreos trituradas (yo compro los paquetes de de oreo triturada de 400gr en Makro).

Vertemos la masa en el molde forrado y al horno a 160º como os he dicho. Al ser un bizcocho muy alto tarda bastante en cocerse. En mi caso tardó 1h y 35min. Ya sabéis que debéis comprobar siempre si está hecho clavando un palillo largo  o una brocheta. Se deja enfriando sobre una rejilla y mientras se prepara un poco de almíbar hirviendo agua y azúcar a partes iguales. Esto es para empapar el bizcocho y que la tarta siga estando jugosa al día siguiente también. Siguiente paso, la crema del relleno.

Buttercream de Oreo ( (Crema de mantequilla con Oreo)

750gr de icing sugar (azúcar glass superfino)*
675gr mantequilla
2 cucharaditas de pasta de vainilla
300gr de oreo súper triturada

Aquí no hay ningún misterio. Sólo hay que batir la mantequilla con el azúcar bien tamizado, sin miedo, un buen rato. Le añadimos la vainilla y seguimos batiendo hasta que tengamos una crema suave. Cuando la tengamos, le pondremos el polvo de oreo y lo dejaremos mezclarse un poco y ya está. Yo usé una manga con boquilla lisa para rellenar la tarta cómodamente.

*El icing sugar no lo venden por aquí en ninguna tienda. Yo lo suelo comprar online.


Montaje

Hay que cortar el bizcocho en 4 capas. Éste tiene 9cm así que saldrá una tarta guay. Si no tenéis lira, tendréis que hacerlo a cuchillo, despacito y con cuidado para que os salgan rectas.
En la foto de más abajo veréis unos palillos. Son las guías para saber como hay que poner las capas del bizcocho y que queden rectas. Es un truco que me enseñó Claudia de Arte-Cake en un curso. Otra cosa a tener en cuenta es la forma de nuestro molde, ya que la mayoría no son de paredes rectas, sino trapezoidales. Así que tened cuidado de no alterar el orden de las capas o será un desastre el montaje.


Ponéis la primera capa con la miga hacia arriba (esta capa tiene que ser la de más arriba porque nuestro culo de bizcocho será la ultima capa) y empapáis con el almíbar. Dejáis unos segundos que chupe y rellenamos la primera capa de crema. Al hacerlo con manga queda más uniforme y regular. Si lo hacéis a espátula, alisad bien todo. Ponemos la segunda capa y repetimos lo del almíbar y la crema. Después una tercera capa. Y cuando nos quede la capa que era el culo, le echaremos un poco de almíbar y la pondremos con la miga hacia abajo.



Ahora hay que poner una capa de la crema por todo el exterior. Iremos alisando con una espátula larga. Yo llegué hasta aquí por las prisas. Coloqué unas galletas oreo pegadas y así se quedó. Pero podéis decorarla con una manga, como más os guste. Por ejemplo, así.



La tarta no tiene el acabado que me hubiera gustado, ni tengo unas fotos bonitas, pero valía la pena enseñárosla porque esta buenísima. ¡Aunque prefiero no pensar en las calorías  que puede tener! De aquí se pueden sacar unas 20 raciones  cortando finito porque es alta y muy potente de sabor. Si queréis hacerla para casa, mejor hacer la mitad o
 ¡regalareis tarta a todos los vecinos!




Si tenéis alguna duda, preguntadme que no cobro jeje. Besos



viernes, 15 de febrero de 2013

Cupcakes de Mango

Hace un par de semanas estuvo un amigo de visita. Y como quería aprender repostería creativa, hicimos estos cupcakes de Mango. Seguro que pensáis que el buttercream tiene un color que hace daño a la vista. Eso no fue cosa mía, sino de mi amigo que quería sorprender a alguien especial. La cuestión es que salieron buenísimos y que unos cuantos se fueron rumbo a Madrid.


Ingredientes para los cupcakes o magdalenas:
(Unos 14 unid.)
120gr. mantequilla
180gr.azúcar normal
230gr. harina
3 huevos tamaño L
2 cucharaditas de levadura química (Royal)
2 cucharaditas de pasta concentrada de Mango Home Chef
120gr. leche

No sé si os lo he comentado alguna vez, todos los ingredientes tienen que estar a temperatura ambiente. Así que acodaros de sacar los huevos, la mantequilla y la leche, fuera de la nevera con antelación. Lo primero que suelo hacer es poner el horno en marcha a 180º con calor arriba y abajo. Después suelo pesar todos los ingredientes. También me gusta tamizar la harina con la levadura antes de arrancar. Y ahora sí.


Se pone la mantequilla que tiene que estar blandita (si es invierno y vuestra cocina es tan fría como la mía, podéis meter unos segundos la mantequilla al micro en función descongelar. Lo justo para que se le pueda meter el dedo pero sin que esté derretida) con el azúcar en el bol de la batidora y le damos caña. Tiene que batirse muy bien para que el azúcar se deshaga con la mantequilla, esto a mano es más bien difícil. Una vez tengamos una crema suave, le añadiremos los huevos uno a uno y a velocidad baja para que no se corte. Un truco que leí, es que si echamos una o dos cucharadas de harina a la vez que el huevo es más difícil que se corte. Yo últimamente lo pongo en práctica. Después de los huevos, voy echando alternativamente parte de la harina con la levadura y de la leche. Cuando está todo ya bien integrado se echa el aroma. En este caso dos cucharaditas de la pasta de Mango de Home Chef.
Pero si alguien quiere probar con un mango maduro troceadito, adelante.

Cuando ya está la masa lista, pongo las cápsulas de papel en la bandeja para cupcakes y lleno ¾. Y se van para el horno que ya está a la temperatura adecuada. No os voy a dar un tiempo concreto porque veo que luego me decís que en vuestros hornos no son los mismos. Así que, que cada cual vea en su horno, entre 20 y 25 min. Sabréis que están cuando al pincharlos salga el palito limpio.

Los ponemos a enfriar sobre una rejilla una vez hechos y nos ponemos con la crema.

Buttercream de Mango:
250gr. mantequilla
325gr. icing sugar o azúcar glass súper fino
3 cucharaditas de leche
2 cucharaditas de pasta concentrada de Mango Home Chef

Aquí un poco más de los mismo con la textura de la mantequilla. Si no, no está blanda os costará  más tiempo batirlo. Se pone el azúcar y la mantequilla en el bol de la batidora y se pone en marcha a velocidad alta hasta que esté cremoso y blanquecino. Añadimos la leche y las pasta de Mango y seguimos batiendo sin miedo hasta que esté súper súper cremoso y brillante. Si queréis podéis teñirla, nosotros usamos el color Electric Pink de Americolor para conseguir ese rosa chicle chillón.

Y mientras limpiamos y recogemos un poco la cocina, se nos terminan de enfriar los cupcakes. Ponemos el buttercream en una manga con la boquilla que nos apetezca y a decorar.


Nosotros anduvimos justitos de tiempo así que sólo añadimos unas florecillas de glasa que tenía hechas. Hice unas fotos a todo correr y me tuve que marchar pitando a trabajar. Bueno, lo confieso, antes de irme nos comimos unos cupcakes…


¡Estaban irresistibles! Espero que os animéis a probar esta receta. Es un sabor muy rico y apetecible, sobre todo para verano. Yo lo he probado en tarta también y gusto a todo el mundo.




Y  colorin colorado, este cuento se ha acabado.
 


viernes, 8 de febrero de 2013

Mercadillo Solidario para Alba Perez y San Valentin

Cada año por estas fechas medio mundo se vuelve de color rojo para celebrar San Valentín. Nosotros no solemos celebrarlo porque el 4 de Febrero es nuestro aniversario. Y estando tan cerca las dos fechas, pues como que no. ¡Además, tenemos 365 días para demostrar nuestro amor hacia nuestra pareja! Y es más divertido sorprender un día cualquiera con un postre especial o un regalo inesperado.

Esta vez he hecho una excepción y he hechos muuuuchos corazones. Por si no lo sabéis, los días 7,8 y 9 de Febrero hay un mercadillo solidario a favor de la Asociación Alba Pérez para la investigación del cáncer infantil. Todo el dinero recaudado con los dulces y demás cositas donadas por gente anónima como yo y como tú, se destinará para seguir estudiando esta enfermedad.


Nosotros también hemos querido  aportar nuestro granito de arena haciendo galletas decoradas. ¿Y qué galletas creéis que hice? ¡Siii, corazones! Porque a la gente le gustan en estas fechas. Y porque a veces yo también me hago ñoña. Espero que los eventos sean un éxito y se recaude todo lo posible. Éstas son algunas de nuestras galletas:



Pero además, para más ambientación romanticota empalagosa, he hecho una tarta de manzana con forma de corazón.
 ¡Hasta quedó mona, oye!


La receta la tenéis en la entrada de la Tarta de Manzana de mi Amuma. Siento no ofreceros nada nuevo esta semana. Una es humana y no puede hacer repostería a todas horas y pretender no comerla. Así que tengo que dosificarme.


Para despedirme de vosotros os dejo una divertida foto de hace unos años. Que se nos han juntado los Carnavales con el día de cupido.Agur.



sábado, 2 de febrero de 2013

Banda de Manzana

La semana pasada fue el cumpleaños de Carlos y le hice esta Banda de Manzana. Me pareció buena elección para un miércoles por la noche. Algo dulce y exquisito pero no demasiado pesado. ¡Solo el olor que dejó por toda la casa era ya irresistible!

Es muy fácil de hacer. Pero os recomiendo hacerla en el último momento justo antes de comer. Que es cuando mejor estará el hojaldre, dorado, crujiente y tibio. Podéis dejar la crema pastelera hecha la víspera, y el mismo día dejar el montaje hecho y el horno precalentándose. Como solo tarda 15 min. en hornearse, la podéis meter mientras hacéis los entremeses o justo cuando saquéis el asado del horno mientras los comensales toman los entrantes.


Necesitamos:

1 lámina de hojaldre cuadrada (yo use la de Lid´L)
2 manzanas Golden grandecitas

Para el puré de manzana:
50gr mantequilla
50gr azúcar
Un poco azúcar para espolvorear
4 cucharaditas de agua
 
Para la Crema Pastelera:

500ml leche
100gr azúcar
44gr Maizena
2 huevos
1 rama canela

Separamos en un bol una pizca de leche y el resto la ponemos a hervir con la rama de canela. Disolvemos la maizena en la leche fría por un lado. Y por otro batimos los huevos con el azúcar. Mezclamos las dos cosas, lo colamos y se lo añadimos a la leche después de retirar la ramita de canela. Batimos y dejamos que hierva la crema hasta que espese.  Pondremos la crema sobre un recipiente con agua fría  para que se enfríe rápidamente. Yo puse la crema en una manga pastelera. Si no la vais a usar al momento, metedla en un taper en la  nevera.

Precalentamos el horno a 200º con calor arriba y abajo. Ahora desenrollamos la lámina de hojaldre con cuidado y la doblamos por la mitad. De forma que nos quede un rectángulo alargado. Aplastamos un poco para que se unas las dos mitades y lo agujereamos con ayuda de un tenedor o un rodillo de púas.



Ponemos dos cordones gruesos de crema en la parte central. Pelamos y cortamos una manzana en 4 gajos. Hacemos laminitas y las colocamos sobre la crema. Espolvoreamos la manzana con un poco azúcar y al horno.

Mientras se hornea haremos el puré de manzana. Para ello pondremos la mantequilla en una sartén y la derretiremos. Añadiremos el azúcar y dejaremos que se haga caramelo. (Seguramente se os cristalizará el caramelo por removerlo, pero no pasa nada. Le añadimos las 4 cucharadas soperas de agua antes de echar la manzana troceada y dejamos que se disuelvan los cristalitos). Si no, directamente saltearemos la manzana. Y añadimos el agua para que no quede muy espeso. Trituramos y reservamos.


En 15 min. nuestro hojaldre estará doradito. Lo sacamos del horno y con ayuda de una brocha pintamos toda la banda con el puré de manzana. ¡Y ya está, lista para hincar el diente! Espero que la probéis, merece la pena con lo buena que está.